Cuando los Jets inauguren la temporada 2011 contra los Dallas Cowboys en el estadio MetLife este domingo a las 8:20 p.m. (WADO 1280), el mariscal Mark Sánchez estará comenzando su tercera campaña profesional, el momento cuando muchas de las grandes estrellas comienzan a imponerse en la NFL.
Y tras dirigir a los Jets a dos finales de la conferencia Americana consecutivas, Sánchez está ansioso por dar el próximo salto, tanto como mariscal como miembro de un equipo contendiente. Más que nunca, los Jets dependerán de su brazo y puntería en el juego aéreo.
"El mariscal tiene que ser bueno, tiene que ser sólido", declaró Sánchez esta semana. "Nada ha cambiado para mí este año. Si acaso, las cosas se han puesto más intensas y es importante que sea certero"
La defensa área de Dallas fue una de las más porosas el año pasado, número 26 en una Liga de 32 equipos. Y fueron número 31 en cuanto a puntos en contra. Los Cowboys comenzarán la campaña diezmados por lesiones en el cuadro de esquineros y profundos, pero los Jets no tienen intenciones de subestimar a su rival.
"No queremos cambiar mucho", dijo Sánchez. "Quien quiera que sea que se ponga el uniforme, hay que estar listos para jugar. Tenemos bastantes vídeos de sus esquineros y profundos, y todos parecen buenos. Hay que ser inteligentes, certeros con el balón y no darles la oportunidad de hacer muchas jugadas".
Un punto de énfasis para Sánchez desde el comienzo de la pretemporada ha sido mejorar su puntería. En su primer año, completó 53.8 por ciento de sus lanzamientos para 12 touchdowns y 20 tiros interceptados. Mejoró un pelo la temporada pasada, completando 54.8 por ciento e invirtiendo su relación de touchdowns a tiros interceptados: 20 a 12. Este año quiere ser mucho mejor.
"No estamos forzando los tiros, ni buscando hacer las jugadas o los tiros grandes", dijo. "Ha sido más revisar todas mis opciones en su orden en cada jugada, mantener la confianza y completar los tiros cuando pueda".
El rendimiento de Sánchez será crítico porque el cuadro de mariscales de los Jets ha cambiado enormemente desde la pretemporada.
Greg McElroy*, quien dio grandes pasos y finalizó la pretemporada con el segundo mejor índice entre los novatos, sufrió una dislocación del pulgar en el último partido que necesitó cirugía y puso fin a su temporada. El segundo mariscal, Mark Brunell *, veterano de 19 campañas, no tomó parte ni en una sola jugada debido a lesiones del dedo y de la pantorrilla, pero dice que estará listo el domingo.
Para ayudar a Sánchez, los Jets ficharon a dos alas veteranos, Plaxico Burress*y Derrick Mason *, figuras que suman 25 años de experiencia y serán de gran valor para un ataque con intenciones de abrir el juego aéreo.
"Son grandes jugadores", dijo Brunell. "Grandes adiciones a nuestro equipo. Han sido enormes en el vestuario y en el campo de juego. Estamos encantados de tenerlos y ambos marcarán una diferencia".
Sánchez está de acuerdo, pero reafirmó que su juego tenía que madurar para que los Jets les saquen el máximo provecho a sus nuevos receptores. En otras palabras, tiene que dar en el blanco.
"Llevan mucho tiempo en la Liga y han jugado con muchos mariscales", dijo Sánchez. "Es mi turno para hacerme cargo. Cuando tienes a especialistas de jugadas grandes, es cuestión de darles el balón y ser certero. Darles la oportunidad de atrapar el balón y correr".
Según las indicaciones preliminares, el cuerpo técnico le dará más libertades a Sánchez este año para cambiar las jugadas en la línea de ataque, de asumir de lleno su papel de líder de los Jets. En pocas palabras, Rex Ryan y sus ayudantes quieren que Sánchez y la ofensiva tomen vuelo.
"Ha sido nuestro gran enfoque", dijo Sánchez. "Ya sea que tengamos el balón para abrir el partido o en la segunda serie, necesitamos marcar puntos. Será nuestra intención cada vez que toquemos el balón, y partiremos desde ahí".
