La primera mitad fue dolorosa tanto para los Jets como para sus aficionados. Y aunque las cosas mejoraron un poco al final del segundo cuarto y al inicio del tercero, no fue suficiente para borrar el sabor amargo de una dolorosa derrota ante Tom Brady, Wes Welker, Leigh Bodden y los demás New England Patriots en el estadio Gillette por 31-14 hoy por la tarde.
En la rueda de prensa después del partido se hizo hincapié en dos temas fundamentales. Primero, ¿querían saber que pasó con todo el tiempo y esfuerzo que invirtieron los jugadores en una semana de intensos entrenamientos? Si los Jets hubiesen triunfado, se hubiesen puesto a un partido del primer lugar en el Este de la Conferencia Americana.
"Jugaron mejor que nosotros, sin duda" afirmó el director técnico Rex Ryan, cuya marca este año empeoró a 4-6, a tres partidos de los Patriots cuando restan seis por jugar. "No hemos perdido la confianza. Pero hay que comprender que cuando sales por el túnel para iniciar el partido, hay que estar mentalizado y con mal humor. En los últimos dos partidos, hemos dejado que el rival dicte el ritmo en lugar de nosotros imponer la pauta. Creo que somos un equipo decente, pero claramente no fuimos mejores que ellos hoy.
"Arrancamos lentos en la primera mitad. Y se aprovecharon de eso", dijo el esquinero Darrelle Revis, que desvió tres lanzamientos e hizo un buen trabajo marcando a Randy Moss. Moss terminó con cinco recepciones para 34 yardas y le dejó el protagonismo a Wes Welker, que tuvo un día histórico con 15 balones para 192 yardas.
"Brady estuvo dirigiendo el ataque a un ritmo rápido", agregó Revis. "Tomaron ventaja de nuestra lentitud".
El otro tema de discusión fue el mariscal Mark Sánchez, que vivió el segundo partido de su joven carrera con cinco errores de balón: cuatro tiros interceptados, tres de ellos por parte de Bodden, y un balón suelto cuando cayó víctima de una captura. Sánchez completó apenas ocho de 21 tiros para 136 yardas, con un touchdown y cuatro interceptados.
"Los primeros dos balones interceptados fueron resultado de buenas decisiones y tiros malos", dijo Sánchez. "Los últimos dos tiros interceptados sucedieron en parte porque intenté improvisar y hacer demasiado… No puedes hacer eso contra una gran defensa. Los aplaudo por seguir fieles a sus esquemas y jugar con inteligencia".
Los compañeros de equipo de Sánchez le mostraron su apoyo incondicional y Ryan dijo que Sánchez seguirá como el mariscal titular.
"No creo que mejorará como jugador sentado en la banca", declaró Ryan. "Sí, cometió muchos errores. Muchos otros también cometieron muchos errores. Tendrá que aprender de ellos".
La pena de todo fue que con un resurgimiento tarde en la primera mitad, cuando Eric Smith tapó un despeje y Brad Smith recogió el balón para un touchdown de cuatro yardas, y temprano en la segunda, cuando Sánchez lanzó un touchdown de 29 yardas a Jerricho Cotchery, los Jets estuvieron a 10 puntos de empatar el partido y lograr el remonte más grande en la historia del club. Del minuto 9:45 del tercer tiempo al minuto 5:06 del cuarto tiempo, cuando Laurence Maroney marcó el último touchdown de los Patriots con un acarreo de una yarda, los Jets hubiesen cambiado el encuentro con dos anotaciones. Pero nunca pudieron armar una marcha seria contra la defensa de New England.
El ataque de los Jets "abrió" el marcador cuando el primer tiro interceptado de Sánchez resultó en una devolución anotadora de 53 yardas de Bodden después de nueve minutos de juego. Y como sucedió la semana anterior ante Jacksonville, la defensa neoyorquina tardó en hacer ajustes. Brady conectó con Welker ocho veces para 139 yardas en la primer mitad, y los Patriots se despegaron en el marcador por 24-0 gracias a 272 yardas ofensivas, el primero de dos acarreos anotadores de Maroney y una recepción para touchdown de Moss.
"Sabíamos que Welker era muy bueno cambiando de dirección mientras corría sus rutas", dijo el esquinero Drew Coleman. "Sabíamos que le iban a tirar el balón y que rara vez iba a fallar. En la segunda mitad, hicimos cambios y salimos dispuestos a hacerlo trabajar".
En la segunda mitad, Welker fue "limitado" a siete recepciones y 53 yardas. La defensa verdiblanca paró al ataque de los Pats en sus tres primeras marchas de la segunda parte, forzando despejes. Pero todo esperanza se desvaneció con el cuarto tiro interceptado de Sánchez. Este corte de balón por parte del profundo Brandon Meriweather dio paso al touchdown de Maroney restando 5:06 por jugar.
La estocada final llegó con el quinto error de balón de Sánchez, que sucedió cuando el apoyador Tully Banta-Cain venció el bloqueo del tackle ofensivo D'Brickashaw Ferguson y le arrebató el balón al mariscal novato.
Ahora, los Jets tendrán que jugar cuesta arriba el resto de la campaña, conscientes de que caminan al borde de un precipicio.
"Al final del día, cada jugador en el equipo tendrá que hacer su trabajo", afirmó el tackle ofensivo Damien Woody. "Pensé que habíamos tenido una gran semana de entrenamientos. Pero hay que repetir ese esfuerzo en el partido. ¿Qué pasó camino al encuentro? Algo anda mal y tenemos que evaluar la situación y descubrir qué está pasando".
Agregó el apoyador Bart Scott: "Somos un equipo desesperado. Con las espaldas contra la pared. No hay ningún remedio mágico. La única manera de salir de un hoyo es excavando".
Notas del partido
El ala defensiva Shaun Ellis tuvo dos capturas de Brady y ahora suma 66.0 en su carrera, el tercer mayor número en la historia del club… Jones marcó su quinto partido de la campaña y el 14.º de su carrera con los Jets con más de 100 yardas corriendo con el balón… El tapón del despeje fue muy parecido al anterior de los Jets. Sucedió hace dos años cuando el apoyador David Bowens bloqueó la patada y se llevó el balón 26 yardas para un touchdown. ¿Dónde lo hizo? En el estadio Gillette. ¿Y contra quién lo hizo? El mismo pateador, Chris Hanson.
Brady sumó más de 300 yardas lanzando el balón por el quinto partido consecutivo. Fue la primera vez que la defensa de los Jets permite tantas yardas por aire desde un encuentro contra Jay Cutler y Denver el 30 de noviembre del 2008… Las 15 recepciones de Welker son el mayor número por parte de un rival desde 1982, cuando el ala cerrada Ozzie Newsome de Cleveland tuvo 14, y sus 193 yardas el mayor número desde que Mark Duper de Miami ganó 217 en ocho recepciones en 1985.
Dos jugadores de los Jets sufrieron lesiones significativas: Dwight Lowery se dobló un tobillo al final de la devolución de un saque en la segunda mitad mientras que Donald Strickland salió del partido debido a un golpe a la cabeza… Seis días después de una operación en su pulgar, Jim Leonhard tuvo un partido impresionante. El profundo titular abrió en su posición habitual y sumó nueve paradas, la segunda mayor cantidad del partido después de las 14 del apoyador David Harris.
